Buscar este blog

jueves, 29 de diciembre de 2022

En busca del tiempo en que vivimos. 4.

Se trata de no contentarse con ser morales fragmentariamente y de aspirar a buscar en nosotros mismos el principio capaz de ordenar nuestra conducta. Este principio podría tener esta forma:

«Tú debes proyectar sobre tu futuro la unidad posible de lo mejor que ya has sido fragmentariamente, de forma que se convierta en principio ordenador de tu vida».

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.

Lecciones no aprendidas

  I Como con frecuencia me cuesta decir que no, me veo obligado a asumir las consecuencias de mi pusilanimidad: vivo bajo un alud de comprom...