sábado, 11 de junio de 2016

Una "palaia diaphora"


La semana que viene, gracias a una amable invitación de Ángel Ruiz, tengo el honor de participar en el curso de verano que organiza en la USC con el título de "Poesía, verdad y filosofía: Platón y nosotros". Dada la temática, le propuse este título: "Platón: filosofía y poesía. Una palaia diaphora"

En el Libro X de la República, Platón asegura que existe una "antigua inquina" (palaia diaphora) entre filosofía y poesía que las lleva a oponerse (enantiosis) entre sí.

Para la conciencia moderna, que da por supuesto que la filosofía y la poesía son actividades democráticas, estas palabras suenan raras. Tan raras, que no son pocos los estudiosos que dan por supuesto que Platón no entendió nunca a los poetas. Pero esta hipótesis choca con un hecho obvio: Platón fue un gran poeta.

Como yo creía tener bien leído (al menos lo tenía abundantemente subrayado) el libro X de la República, supuse que podría salir airoso del reto sin dedicar demasiado tiempo a la preparación de la conferencia.

Pero no ha sido así. La prueba es que aún no la tengo acabada. Ni sé muy bien cómo acabarla (Ángel, si lees esto, espero que no me retires la invitación). Y la culpa es de Platón. 

En lugar de fiarme de lo que creía haber entendido del Libro X, volví al texto de la República despacio, siguiendo palabra por palabra los argumentos de Sócrates. Y en ellos ando enredado. Si algo me ha puesto claramente de manifiesto mi ya largo trato con Platón es que todo lo que crees saber de su filosofía sólo te prepara para nuevas sorpresas en la relectura. Pero, más allá de mis problemas puntuales, hay algo que constato de nuevo: Platón es nuestro contemporáneo. Más aún: ha visto cosas de nosotros que nosotros sólo podemos ver a través de sus textos. 

1 comentario:

  1. Estoy deseando oír lo que tengas preparado. Me da igual que no la "acabes": bastará con oír lo mucho y jugoso que tendrás que decir sobre tu proceso de lectura del libro X.

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