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sábado, 5 de noviembre de 2016

El timo intelectual de las competencias...

... poco a poco se va poniendo al descubierto.



10 comentarios:

  1. ¿En qué contradice esto a las competencias?

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  2. Disculpe don Gregorio, ¿podría comentar brevemente su titular?

    Gracias.

    José

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  3. En este café me he mostrado en varias ocasiones contrario a la reducción instrumental del conocimiento y, por ello, partidario de la taxonomía de Bloom.
    Bloom despliega el proceso del dominio cognoscitivo en estas facetas: Conocimiento, comprensión, aplicación, análisis, síntesis y evaluación. La teoría de las competencias cree que el conocimiento se reduce a la aplicación. Por eso es un timo intelectual...
    Esta teoría nace claramente como propuesta de mejorar las habilidades técnicas de los trabajadores y de ahí que se centre en "skills". Las competencias son -en su origen, insisto- la constatación de que es más importante saber hacer cosas que saber por qué se hacen.
    Sin embargo recientemente estoy comprobando que se está hablando de "competencias teóricas", lo cual introduce un grado de confusión supino en la "teoría" de las competencias y la convierte en inútil, en retórica.
    Al grano: Cuando se ignora la teoría, se ignora el concepto y, por lo tanto se pierde capacidad de autoevaluación. Esto es, a mi parecer, lo que está diciendo este informe cuando resalta, por ejemplo, que los alumnos con mejor comprensión matemática "develop deep conceptual understanding" o que "greater exposure tu pure mathematics tasks and concepts has a strong relationship with higher perfomance".

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    1. Muchas gracias don Gregorio, todo un honor que dedique parte de su tiempo a mi demanda.

      José

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  4. "La teoría de las competencias cree que el conocimiento se reduce a la aplicación. Por eso es un timo intelectual... "

    No, no es cierto.

    "Las competencias son -en su origen, insisto- la constatación de que es más importante saber hacer cosas que saber por qué se hacen."

    Aunque fuera cierto lo de su origen, no es cierto lo demás.

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    1. Tal como plantea usted las cosas, podríamos pasarnos la vida demostrando nuestra incompetencia dialogal: usted me diría que "no es cierto" y yo le respondería que "sí es cierto" y el bucle infinito acabaría aburriendo a todo el mundo. Quizás hasta a nosotros mismos.
      Se mire como se mire, la teoría de las competencias prioriza -cuando no absolutiza- el "know how" al "know that", lo cual estaría muy bien si el único modelo de aprendizaje fuese el de aprender a andar en bici. Pero no lo es.
      Vaya usted por los centros educativos y pregunte cuántos de los que hacen programaciones por competencias consideran que el “knowledge-that” o “propositional knowledge” es relevante. Yo lo pregunto.

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    2. Como persona conocedora de cómo funciona un debate racional sabe usted que me basta con negar, pues es usted quien afirma y quien debe demostrar.

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  5. La teoría de las competencias ve al hombre exclusivamente como "homo habilis" o como "homo faber". Es decir, como el animal tecnológicamente más desarrollado (las competencias son herramientas tecnológicas intelectuales). La teoría, sin embargo, lo ve –desde Aristóteles, al menos- como un ser diferente. Y su diferencia específica se encuentra en su capacidad de teorizar.

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  6. Buenas tardes.
    Hice una intervención en este blog hace unos días por razón de un libro, EL COLECTIVO DIMITIDO, ANÁLISIS PARA ENTENDER EL DECLIVE DE LA EDUCACIÓN PÚBLICA ESPAÑOLA, que me había sorprendido enormemente. Parece que le quiera hacer publicidad, pero es que me fascina cómo trata muchos de los temas que van apareciendo en este blog, entre ellos el de las competencias. Coinciden plenamente en que es una estafa, y aportan incluso documentos donde queda claro cuál es su origen empresarial y su verdadero objetivo en la educación. EN el libro hacen además una reflexión muy interesante: los problemas de los exámenes PISA no son teóricos sino competenciales. ¡Pero los alumnos asiáticos, con una enseñanza con más carga de contenidos que la nuestra, sacan mejor resultado que los nuestros! Es decir, exactamente lo que dice arriba el Sr. Luri del documento que da comienzo a este hilo: "greater exposure tu pure mathematics tasks and concepts has a strong relationship with higher perfomance", es decir, la enseñanza de matemáticas formales con carga de conceptos es justamente lo que hace a los niños más competentes. Dicho de otra forma, no puede existir la "competencia" vaciada de contenidos, es un absurdo. La competencia es, precisamente, la consecuencia indefectible de una educación bien equilibrada de exigencia, contenidos teóricos y adecuada y suficiente práctica. No se puede enseñar a "ser competente" así, en vacío. Y los que nos dicen que sí que se puede lo que buscan es otra cosa más sibilina...¡léanse el libro, no tiene desperdicio! Gracias.. LUCÍA

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  7. Buenas tardes.
    Hice una intervención en este blog hace unos días por razón de un libro, EL COLECTIVO DIMITIDO, ANÁLISIS PARA ENTENDER EL DECLIVE DE LA EDUCACIÓN PÚBLICA ESPAÑOLA, que me había sorprendido enormemente. Parece que le quiera hacer publicidad, pero es que me fascina cómo trata muchos de los temas que van apareciendo en este blog, entre ellos el de las competencias. Coinciden plenamente en que es una estafa, y aportan incluso documentos donde queda claro cuál es su origen empresarial y su verdadero objetivo en la educación. EN el libro hacen además una reflexión muy interesante: los problemas de los exámenes PISA no son teóricos sino competenciales. ¡Pero los alumnos asiáticos, con una enseñanza con más carga de contenidos que la nuestra, sacan mejor resultado que los nuestros! Es decir, exactamente lo que dice arriba el Sr. Luri del documento que da comienzo a este hilo: "greater exposure tu pure mathematics tasks and concepts has a strong relationship with higher perfomance", es decir, la enseñanza de matemáticas formales con carga de conceptos es justamente lo que hace a los niños más competentes. Dicho de otra forma, no puede existir la "competencia" vaciada de contenidos, es un absurdo. La competencia es, precisamente, la consecuencia indefectible de una educación bien equilibrada de exigencia, contenidos teóricos y adecuada y suficiente práctica. No se puede enseñar a "ser competente" así, en vacío. Y los que nos dicen que sí que se puede lo que buscan es otra cosa más sibilina...¡léanse el libro, no tiene desperdicio! Gracias.. LUCÍA

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