jueves, 12 de mayo de 2011

Inteligencias múltiples

Le han dado a Howard Gardner el Premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales por su teoría de las inteligencias múltiples. Allá cada cual con su inteligencia, pero la mía, que tiene voluntad de ser común, me dice que esto de las inteligencias múltiples es un fraude intelectual. Si el cerebro es una unidad funcional, hablar de inteligencias múltiples es un sinsentido muy propio, eso sí, de la posmodernidad New Age. Y me da la sensación que el último Gardner lo está intuyendo.  No me extrañaría nada que el Gardner que recoja el premio ya no sea aquel que, a juicio del jurado, lo mereció.


10 comentarios:

  1. Sin tener un conocimiento de sus teorías, razón por la que me muevo en el mero campo nominal, las "inteligencias múltiples" me parecen perfectamente sustituíbles por "destrezas o habilidades múltiples", sin que la constatación de la existencia de las tales permita deducir la capacidad intelectual del sujeto para abordar con éxito el estudio de estos o aquellos saberes, al margen de en lo que el sujeto se manifiesta capaz o muy capaz. Todos tenemos alumnos de los que decimos que tienen una habilidad sorprendente para alguna materia en concreto, pero que son incapaces en casi todas las demás. La cuestión es cómo se estructura un sistema de enseñanza en torno a esas capacidades sin convertirse en un fiasco para el propio individuo. Serí algo así como plantear un curso con 30 itinerarios distintos de aprendizaje. Soy partidario de una reestructuracion radical del currículo estudiantil, al que se ha de aligerar bastante y en el que han de cobrar mayor importancia las asignaturas instrumentales, que han de impartirse diariamente, de ahí que, cumplida esa "necesidad", el resto de currículo que quede pueda organizarse, en efecto, a partir de las inclinaciones de los alumnos, siempre y cuando sean compartidas en número suficiente para poder distribuir los grupos y el profesorado, aunque haya hoy algunos grupos que casi casi se acercan a la clase particular como pasa con las lenguas clásicas. Casi estoy tentado de proponer que el latín se convierta en instrumental...
    En fin, extralimitarse en el uso del concepto "inteligencia" es tan corriente como desconocer la esencia y los procedimientos de ella. En última instancia, la voz latina de la que procede inteligencia nos habla no tanto de "procesar información" cuanto de "percibir", de "darse cuenta" (el famoso "awareness") de la existencia de dicha información. A veces a la "inteligencia" la engaña la carta robada...

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  2. http://www.elpais.com/articulo/sociedad/inteligencia/solo/indica/estudio/ninos/adolescentes/elpepusoc/20110224elpepusoc_14/Tes

    Y ahí dejo eso.

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  3. El problema de las inteligencias múltiples no es filosófico, sino empírico. ¿La gente buena en matemáticas tiende ser buena en lengua? Sí. ¿La gente buena en música tienda a ser buena en inglés? Sí. Gardner se zumba cien años de investigación sin ningún complejo. Y mucho le ríen la gracia.

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  4. Topo: Totalmente de acuerdo. Nos reímos del factor "G" de una manera que no se compadece conb los hechos. Yo he tenido poquísimos alumnos (porque alguno he tenido) que fuera excepcionalmente bueno en una cosa y excepcionalmente malo en otra y allá donde eran buenos lo que había, básicamente, no era inteligencia, sino ejercicio.
    Que le den a este señor el Príncipe de Asturias dice mucho, no de Gardner, sino del estado general de nuestras ciencias sociales.
    Lo diré directamente: Me parece un escándalo.
    Es como darle el Nobel de medicina a un curandero.

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  5. Hace poco escuchaba, creo que a José Manuel Lacasa (http://blogdelifie.blogspot.com/), contar que una de las diferencias entre Oriente y Occidente es la atribución del éxito. Aquí, a la pregunta de por qué le va bien a la gente, nos inclinamos más por decir que por su inteligencia, mientras que allá se considera que por su esfuerzo. Más probablemente será el producto de ambas.

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    El factor g no excluye la posibilidad de que haya gente muy torpe en algo y que despuente en otro campo cognitivo. Lo mismo que decir que hay relación entre altura y peso no implica que no pueda haber bajitos de 150 kilos.

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    Es un escándalo. Bastante teníamos con Punset y ahora nos viene Gardner.

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    Para no filósofos y con poca inclinación platónica (lo mismo derivada de una pobre formación en bachillerato; dispuesto a modificarla), ¿qué podemos esperar de la charla del lunes? Soy fácil de tentar. Ah, ¿y hace falta invitación?

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  6. Alguna vez leí que los científicos que por primera vez propusieron la posibilidad de las inteligencias múltiples, habían probado que tal cosa no existía.

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  7. La inteligencia no existe. Es un invento de los padres con hijos feos.

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  8. Yo creo que este año el premio sigue la línea de los anteriores, así como los de los otros campos premiados.
    Al fin y al cabo, no por nada llevan estos premios el nombre de un príncipe avergonzado de serlo, y nada como la inseguridad para acabar en brazos de la supuesta voz del pueblo.
    Si a uno le quedaran ánimos para ello, empezaría a promover la opción Elena, único miembro de la casa real que parece saber en qué consiste eso. O, al menos, su regencia hasta que Froilán, que apunta maneras, cumpla la edad.
    Y no es broma.

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  9. http://robertocolom.blogspot.com/2011/05/howard-gardner.html

    Roberto Colom es uno de los mayores especialistas españoles en inteligencia humana. En esa entrada da su visión del premio a Gardner.

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  10. Don Topo: Totalmente de acuerdo con Roberto Colom, tanto que voy a difundir su artículo cuanto pueda.
    Efectivamente, el premio contribuye a fomentar los vicios actuales de nuestra escuela.

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